TORAH


MANDAMIENTO/MITZVÁH 30 (PARASHÁ YITRÓ) NO JURAR EN VANO: No debemos jurar en vano (sin un propósito válido), ya que está dicho "No pronunciarás el nombre del Eterno en vano"(Shemót/Éxodo 20.7).

Ahora bien la expresión "en vano"(sin un propósito) puede adoptar cuatro formas (1) Por ejmplo si alguien jura acerca de algo sabido, diciéndo que no es así , por ejemplo jurar que una columna de mármol es de oro, y ejemplos similares. (2) Si alguien jura acerca de algo sabido, diciendo que sí es así, por ejemplo que la piedra es piedra, o que la madera es madera y casos similares. (3) Si alguien jura violar "este precepto" o cualquier precepto en general que el Eterno son mandó a observar. Esto también es vano, sin un propósito, ya qué no está en su poder dar un juramento acerca de violar algo a lo que Di-os ya lo obligó. Es jurar que algo conocido no es como es. (4) Si  alguien jura hacer algo que no tiene el poder o la fuerza de hacer, por ejemplo, que no dormirá durante tres días seguidos, o que no comerá durante siete días seguidos, o ejemplos similares.

MANDAMIENTO/MITZVÁH 33 (PARASHÁ YITRÓ) EL PRECEPTO DE HONRAR A LOS PADRES: Honrar al padre y a la madre, ya que está dicho: "Honrás a tu padre y a tu madre" (Shemót/Éxodo 20.12). La explicación aparece en la tradición oral: ¿en qué consiste este honor? En suministrar comida y bebida, vestido e indumentaria, y en recibirlos y acompañarlos.
La raíz de está Mitzváh está en el pensamiento de que es adecuado que el hombre reconozca y trate con bondad a la persona que lo trató con bondad, y no debe comportarse como un villano y un ingrato que le da vuelta la cara, ya que eso es mala cualidad, vil ante Di-os y la humanidad.
Es para que la persona se de cuenta de que sus padres son la causa de su existencia en este mundo; de allí que deba rendirle todos los honores y todos los beneficios de que sea capaz, ya que ellos lo trajeron al mundo y luego, además, trabajaron y atravesaron muchas dificultades en los primeros años de su vida.
MANDAMIENTO/MITZVÁH 48 (PARASHÁ MISHPATIM) NO GOLPEAR AL PADRE NI A LA MADRE: El hijo no debe golpear a sus padres, ni siquiera si ellos le dieron una severa golpiza, mientras no tengan la intención de matarlo, ya que está dicho "Y el que golpearé a su padre o a su madre será muerto". (Shémot/Éxodo 21.15)
Ahora bien, las Escrituras no ofrecen una advertencia explícita respecto de esta situación diciéndo: "No golpeen a sus padres", sino que se refiere básicamente al castigo que recibirá el que los golpee. Sin embargo, es típico del Talmud preguntar en tales casos: "Hemos oído el castigo.  Pero ¿De dónde aprendemos la advertencia?"
Sin embargo, también acerca de esto encontramos una advertencia, ya que nos dicen que no se puede golpear a ningún judío. Ya que está escrito acerca de un hombre que recibió latigazos "Le podrás dar hasta cuarenta azotes, ni uno más" (Devarím/Deuteronomio 25.3) ¡Cuánto más se aplica esto a la persona que no merecía latigazos" Y el padre está incluído dentro de la advertencia de no golpear a ningún judío. De allí se deriva la advertencia respecto de los padres.
Ahora bien , si bien esta prohibición "no puede darle más" se considera a sí mismo un precepto negativo, no obstante tenemos una regla de que todo lo que significa karet (Separación Divina de la existancia) o la pena de muerte, es tema de un precepto negativo, excepto la ofrenda pascual y la circunsición.
Y por golpear a los padres, se merece karet si no hubo testigos, y la pena de muerte si hubo testigos. Por lo tanto, en cualquier caso, la advertencia se desprende del versículo "no puedes darles más", ya que no la hallamos en ninguna otra parte. La advertencia principal se refiere a golpear a los judíos, y por extensión se aplica alque golpea a los padres.



MANDAMIENTO/MITZVÁH 212 (PARASHÁ KEDOSHIM) LA MITZVÁH DE RESPETAR A LOS PADRES: Tner reverencia y respeto por los padres; en otras palabras el hombre debe comportarse hacia sus padres del modo en que se comportaría hacia alguien por quien siente temor y reverencia, ya que está escrito "Cada uno de vosotros temerá a su padre y a su madre" (Vayikrá/Levítico 19.3)



En las palabras del Midrash Sifra: ¿En qué consiste el temor reverencial? La persona no debe sentarse en el lugar de su padre, ni debe hablar en su lugar, ni contradecir sus palabras.



MANDAMIENTO/MITZVÁH 231 (PARASHÁ KEDOSHIM) LA PROHIBICIÓN DE INSULTAR A NINGÚN JUDÍO, YA SEA HOMBRE O MUJER: No insultar a ningún judío, ni hombre ni mujer, ni siquiera si no oye el insulto, ya que está dicho "No te mofarás del sordo" (Vayiká/Levítico 19.14), y la tradición oral explica que "sordo" se refiere a cualquier persona que no oye el insulto; y así lo traduce Onkelos.



El Midrash Sifra se pregunta: De aquí aprendo únicamente respecto del sordo, pero ¿de dónde aprendo que se aplica a todas las personas? La Toráh dice "no maldecirás" (Shemót/Éxodo 22.27). En ese caso  ¿porque se habla del "sordo"? Porque es característico del sordo estar vivo; así se excluye a los muertos.



Ahora bien, si bien no está en nuestro poder saber de que forma tiene efecto la maldición sobre una persona y qué fuerzas tienen las palabras, sí sabemos que las personas temen mucho a las maldiciones, tanto dentro como fuera del judaísmo. Se dice que la maldición deja una marca en la persona insultada.

MANDAMIENTO/MITZVÁH 253 - (PARASHÁ KEDOSHIM) LA PROHIBICIÓN DE HACERSE TATUAJES EN LA PIEL: No debemos practicarnos tatuajes en la piel, ya que está dicho "No os haréis tatuajes en la piel" (Vayikrá/Levítico 19.28).
Esto es lo que hacen los ismaelitas actualmente, que se hacen tatuajes permanentes en la piel, que son imborrables.
La raíz del precepto es la misma que en los preceptos anteriores de alejar todo lo relacionado con la idolatría de nuestros cuerpos y de nuestras mentes.

MANDAMIENTO/MITZVÁH 260 - (PARASHÁ KEDOSHIM) LA PROHIBICIÓN DE MALDECIR A LOS PADRES: No maldecir a los padres ya que está dicho "Quien maldijera a su padre o a su madre será castigado con la muerte" (Vayikrá/Levítico 20.9) En verdad, la advertencia respecto de maldecir a los padres no se aprende de este versículo, ya que aquí sólo se menciona el castigo que merece la persona que los insulta.

También la Sidrá Mishpatim, aparece el versículo "Y el que maldiga a su padre o a su madre será castigado con la muerte" (Shemót/Éxodo 21.17): allí también se menciona únicamente el castigo.

MANDAMIENTO/MITZVÁH 296 - (PARASHÁ EMOR) LA MITZVÁH DE SANTIFICAR EL NOMBRE DE HASHEM: Se nos ordenó santificar el Nombre Divino, ya que está escrito "Y seré santificado entre los hijos de Israel" (Vayikrá/Levítico 22.32) lo cual significa que debemos estar dispuestos a dar la vida, a morir en la observancia de un precepto religioso. Hace mucho tiempo los Sabios de bendita memoria explicaron, tanto en la tradición oral como a través de los versículos de la Toráh, cuáles son las situaciones y cuáles son las mitzvót por la qué se nos ordeno dar la vida.

Ahora bien, si bien en la Toráh está escrito "El hombre que las cumpla vivirá en ella" (Vayikrá/Levítico 18.5) , lo cual implica que no morirá por ellas, existe una antigua tradición según la cual este versículo no debe aplicarse a todas las situaciones y a todos los pecados; y es según la tradición oral que nos regimos en cuánto a las palabras de la Toráh.

MANDAMIENTO/MITZVÁH 338 - (PARASHÁ BEHAR) LA PROHIBICIÓN DE ACOSAR A UN JUDÍO CON PALABRAS: No molestar ni acosar a un judío con palabras, lo cuál significa que no debemos decirle al israelita nada que le haga sufrir, cuando este no puede hacer frente a estas expresiones. Nuestros Sabios de bendita memoria dijeron ejemplos explícitos de este tipo de conducta; por ejemplo si la otra persona es un pecador arrepentido, no debemos decirle "No te olvides de lo que hacías antes..." Si ahora sufre, no debemos decirle, como le dijeron a Job  sus amigos ¿Acaso no es tu temor de Di-os tu fuente de confianza? Job 4.6
Si vemos hombres que van montados sobres burros buscando cereales, no debemos decirles "Vayan a lo de X", cuando sabemos que esa persona no tiene cereales.
Ni tampoco debemos preguntarle al comerciante "¿Cuánto vale este producto?", cuándo no tenemos ninguna intención de comprarlo. por eso dice la Toráh: "No engañarás pues al prójimo"(Vayikrá/Levítico 25.17)



MANDAMIENTO/MITZVÁH  419 - (PARASHÁ VAETJANAN) EL PRECEPTO DEL ESTUDIO DE LA TORÁH: Es un precepto positivo estudiar la Toráh y enseñarla: en otras palabras, aprender cómo debemos cumplir con los preceptos y mantenernos alejados de lo quee Di-os nos ha prohibido; y además, conocer las ordenanzas de la Toráh  de acuerdo con la verdad.


Respecto de esto, está escrito "E ibnculcarás estos mandatos a tus hijos". (Devarím/Deuteronomio 6.7) respecto de lo cuál enseñaron nuestros Sabios: "tus hijos"significa: "tus alumnos", ya que está dicho "Y vinieron los hijos de los profetas" (2a.Reyes 2.3) Y dice además : "e inculcarás"...lo cuál significa en hebreo, que deberás ordenar en tu boca las palabras de la Toráh; y cuando un hombre te pregunta algo, no debes titubear, sino que debes responderle en forma directa.



Este precepto aparece reiterado en muchas instancias: en "para que los aprendáis y los cumpláis"(Devarím/Deuteronomio 5.1); "para que aprendan"(Devarím/Deuteronomio 31.12); "Y los enseñarás a tus hijos"(Devarím/Deuteronomio 11.19) 


MANDAMIENTO/MITZVÁH 430 (PARASHÁ EKEV) EL PRECEPTO DE BENDECIR AL ETERNO POR LA COMIDA QUE RECIBIMOS: Bendecir al Eterno después de comer un pedazo de pan o de alguna de las siete especies mencionadas en la Toráh. El término general "pan" se refiere a una hogaza hecha con trigo o cebada y dentro de la categoría  de "trigo" está incluida la espelta, y dentro de la categoría de "cebada" estánincluidos la avena y el centeno.

Pero respecto de las siete especies nutritivas en general está escrito "Cuándo hayas comido y te hayas saciado, bendecirás al eterno tú Di-os por la buena tierra que te dió (Devarím/Deuteronomio 8.10)

Ahora bien, para la saciedad (satisfacción de haber comido) de que hablamos no existe una medida uniforme para todas las personas, sino que cada uno conoce su medida; y nosotros sabemos la medida de la satisfacción del tzadik, que come para satisfacer su espíritu es decir, únicamente para su subsistencia.


MANDAMIENTO/MITZVÁH 611 - (PARASHÁ KI TAVO) EL PRECEPTO DE EMULAR AL ETERNO: Se nos ordenó realizar todos nuestros actos de un modo honesto y con bondad, y de manejarnos en nuestras relaciones con los demás con generosidad y compasión, ya que la Toráh nos enseña que así es como se comporta el Eterno, y así es cómo Él quiere que nos comportemos nosotros , los seres humanos, a fin de ser merecedores de Sú Recompensa, como está dicho: "Se deleita en la misericordia" (Miqueas 7.18)

Respecto de esto está también dicho "Si cumples Sus mandatos siguiendo Sus caminos" (Devarím/Deuteronomio 28.9) El precepto aparece reiterado en otra parte, cuando dice "¿Que quiere de tí el Eterno sino que Le temas y sigas Sus caminos amándole y sirviéndole con todo tu corazón y toda tu alma?" (ídem 10:12)